En el año de 1785 un hombre se encontraba cruzando un callejón en búsqueda de una partera debido a que su esposa
estaba a punto de dar a luz, cuando de pronto un hombre vestido de negro se interpone en su camino y lo amenaza pidiéndole su dinero, este hombre quien estaba a punto de ser padre saco su espada y le quito la vida al asaltante, desde entonces se dice que su alma sigue penando a altas horas de la noche asustando gente pidiéndole dinero por las malas, por respeto al difunto se le coloco una cruz para que pudiera encontrar la paz.