cuenta la leyenda que el chamuco un día cuando hacia de las suyas se encontró cara a cara con la profesión del señor de los milagros y la virgen del carmen, espantado por la devoción decidió escapar pero al voltear se atravesó con enorme peña que en modo de pared impedía su fuga vertiginosa de tal manera que no tuvo otro remedio que agujerarla, algunos vecinos cuentan que en los alrededores de esta piedra en algunas noches pueden escucharse algunos suspiros capaces de hacer templar las piernas y poner los pelos de punta al mas valiente.