La leyenda de Edward Mondrake es una triste y aterradora historia real que con el
correr del tiempo se convirtió en leyenda. Edward era un joven que nació con una malformación congénita insólita, nació con un rostro pegado en la nuca, según el mismo se trataba de una mujer. El rostro en la nuca se reía cuando Edward lloraba o estaba triste, además seguía con la mirada a las personas que pasaban cerca, pero no podía hablar, solo se limitaba a susurrarle en la mente ideas horribles al pobre joven, Edward mismo decía que se trataba de un demonio, así que un día no aguantó más y se quito la vida con tan solo 23 años, luego de rogarle durante años a los médicos que le extirparan a la horrible criatura. En su testamento le pidió disculpas a sus padres por la decisión, pero solicitó que lo enterraran sin la cara en su nuca, para que el no lo atormentase también en la muerte, es una historia increíble, pero real.