La Araña Navideña. Se cuenta que hace mucho, mucho tiempo en un país bastante lejano una familia muy humilde cuya madre solía limpiar muchísimo el hogar e incluso en aquellos pequeños rincones donde por lo regular aparecen pequeñas telas de araña con el paso del tiempo, al limpiar algunas de las arañas huyeron al ático al darse cuenta de que sus telas habían sido destruidas.
La navidad se aproximaba y las arañas querían ser parte de esta increíble noche la cual es el nacimiento de Jesús, entonces una de las arañas más sabias tuvo la idea de bajar del ático y esconderse entre los adornos del árbol y así fue como esperaron todas esparcidas en el árbol navideño. Esa misma noche cuando Santa Claus bajo por la chimenea a poner los regalos se dio cuenta de que el árbol estaba lleno de arañas, entonces sintió lastima por las pequeñas criaturas que solo querían ser parte de la navidad así que con un pequeño golpe mágico sobre el árbol de navidad las convirtió en largas tiras brillas y luminosas, es decir las convirtió en decoraciones navideñas.