Cuenta la gente que no hay ningún caso de dinero enterrado ni ruidos extraños en las noches en la torre de San
Este torreón perteneció a una hacienda cercana de San Carlos y se cree que lo usaban para rezar muchos años atrás, ahora es solamente un atractivo para el lugar, y tal vez la niña que algunas personas ven murió en un accidente cercano y su alma se quedó en ese lugar.