Según las creencias de la antigua china las sirenas eran unas criaturas
Se dice que su canto embrujaban a los hombres del mar; y este mismo canto de el que sucumbió a un pescador mientras laboraba, cuenta la leyenda que este pescador era muy atractivo y esta sirena fue cautivada por la belleza de este joven pescador, y esta joven sirena renuncio a su inmortalidad con la final de poseer el aspecto de una mujer, dejar de ser una mujer mitad pescado para así mantener y enamorar al apuesto joven pescador, cuenta que este joven pescador fue cautivado por su belleza que le forjo una escultura de bronce, para asombro de aquella bella mujer la escultura era mitad mujer y mitad pez, ya que el joven pescador dijo que nunca vio criatura tan hermosa como aquella sirena que le cantó el día que la conoció.