Una segunda oportunidad. Gumaro era un hombre bueno el cual durante toda
Cuando Gumaro regresaba a casa luego de festejar con su madre el año nuevo, un conductor ebrio provoco un accidente donde murió Gumaro. El día de su funeral el fantasma de Gumaro se encontraba presente junto a otra alma, ambos estaban hay para escuchar a las personas durante el funeral, ya que Gumaro había sido enviado al infierno y quería remediar eso, pero aun después de escuchar todos los buenos comentarios fue llevado de vuelta al infierno y a una gran silla donde pudo ver porque estaba ahí, durante la noche donde fallecio, el observo como un conductor se dirigía a él, al intentar salvarse arrollo a una anciana porque de un lado había unos pandilleros y del otro una anciana, así que decidió desviar su carro en ese rumbo e intentar salvarse,
